Sinopsis
La
venganza es un plato que se sirve frío
He
aquí la hilarante epopeya de Rose, una cocinera que nunca le ha
temido a nada y que ha sobrevivido a las barbaries del siglo xx (el
genocidio armenio, los horrores del nazismo y los delirios del
maoísmo) sin perder el humor, el deseo de sexo y el afán de
venganza: los tres pilares de la felicidad en su particular credo.
A
los ciento cinco años aún regenta su famoso restaurante en
Marsella, guarda una pistola en el bolso y no puede evitar los
pensamientos eróticos cuando se cruza con algún tipo interesante.
Esta singular cocinera, marcada por dos hombres y un siglo, se toma
la justicia por su mano matando a sus enemigos suavemente. Rose
pertenece ya a esa galería de grandes personajes literarios de los
que no podemos separarnos.
La
cocinera de himmler es un libro que me llamo la atención desde el
primer momento en que llego a la tienda, su argumento me intereso
desde el principio, así que me puse a leerlo inmediatamente, he
de decir que no me esperaba la historia que me iba a encontrar, si
que me esperaba que fuese una novela interesante, ya solo su titulo
lo es, pues bien en ningún momento me decepciono.
Rose
nuestra centenaria protagonista es un personaje muy peculiar llena de
fuerza y muy carismática, la venganza, el amor y el sexo son su credo,
su vida es muy intensa y apasionante, iras pasando la paginas si
apenas darte cuenta, disfrutaras con cada palabra.
Rose
estará dispuesta a todo por defender a los suyos, la novela a pesar
de los momentos difíciles que le toca vivir a nuestra peculiar
protagonista esta cargada de humor , no podrás evitar reírte en
momentos que quizá parezca duros.
La
novela me ha encantado, y si lo que buscas es una historia
interesante, que te saque muchas sonrisas y que se lea del tirón
este es tu libro.
“ No
soporto a la gente que se queja. El problema es
que
el mundo está lleno. Por eso tengo un problema con la gente”
“El
día de mi nacimiento, los tres personajes que iban a arrasar la
humanidad ya estaban en este mundo: Hitler tenía dieciocho años,
Stalin, veintiocho, Y mao trece. Había caído en el siglo
equivocado: el suyo.”
Littah
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